Durante mi última estancia en París me alojé en el Hotel La Lanterne. Ya os he comentado lo mucho que me gustan los hoteles pequeñitos tipo boutique, así que estaba deseando ver como era mi impresión en el Hotel La Lanterne.
Todo fue perfecto, así que os voy a hacer un buen resumen de lo que fue mi estancia en el hotel.
Dónde dormir en París: Hotel La Lanterne
Voy a intentar ir por orden y no saltar directamente a la piscina que tiene el hotel pero va a ser difícil. Como consideraciones generales, deciros que el hotel es un hotel boutique. La primera sensación que uno tiene cuando entra al hotel es en el de estar en un hotel original pero siempre con ese toque chic típicamente parisino. Todos los detalles de la recepción y salas comunes están especialmente cuidados.
En cuanto a localización, el hotel está situado en pleno barrio latino, para mí la mejor zona para alojarse en París. ¿Por qué? Pues primeramente porque es un barrio auténtico parisino, encontraréis un montón de restaurantes, cafeterías y confiterías por todas las calles y porque está muy cerca del centro pero suficientemente alejado de toda la zona más turística para poder descansar tranquilos. El hotel La Lanterne está situado a escasos 3 minutos de la parada de Metro 10 con lo que si no os apetece andar o estáis cansados, tenéis opción alternativa.
Hablemos ahora del servicio. Lo bueno de estos pequeños hoteles boutique es que al tener menos habitaciones que las grandes cadenas, dan un servicio excelente y con una cercanía casi familiar. Sinceramente esto me encanta. Es mucho mejor que ser un simple número en un hotel más grande. Me trataron de lujo siempre preguntándome si necesitaba algo. Servicio pues, impecable.
El hotel en sí, como os he dicho antes, es un hotel estilo boutique, con unos muy cuidados diseños interiores que hace que sentarse a tomar algo en el pequeño bar o en el hall resulte muy agradable. Esto se traslada por supuesto a las habitaciones, en las cuales destaca siempre un poster con motivos parisinos sobre el cabecero de la cama.
El baño es bastante estiloso, decorado en negro con una ducha de pared tamizada muy curiosa y bonita a la vez. Todo ello acompañado de productos de Anne Semonin. La habitación que yo disfruté era de un tamaño generoso y bastante espaciosa para lo que es París.
Pero esta habitación, la privilege top floor, destaca por una cosa. Sus dos terrazas con vistas a las hermosas calles parisinas. Levantarse, darse una ducha y salir a la terraza a disfrutar del café o periódico es una experienca muy TOP. Como además en la habitación viene incluida una máquina nespresso, puedes disfrutar de ese café tantas veces como quieras!
Otro muy buen detalle del hotel, es que cuando llegas a la habitación encontrarás un smartphone Samsung Galaxy con conexión 4G durante toda la estancia. Simplemente elegís el idioma y el móvil se configurará. LLeva un software especial que hace de guía, por lo que podéis buscar sitios que ver, restaurantes etc de una manera muy sencilla. A parte de todo esto, lleva instaladas por supuestos las típicas apps como Maps, Facebook, Instagram etc. En un menú al inicio de la pantalla podéis borrar todos vuestros datos de un click, está todo pensado chicos!
Por último, deciros que en la habitación encontraréis albornoz y zapatillas, el conjunto necesario para disfrutar del punto grande del hotel...la piscina indoor. A ver como lo explico, si os dicen que después de una larga caminata, pasear por los alrededores de la Torre Eiffel o Notre Dame, podéis llegar al hotel, coger vuestro albornoz, traje de baño, llamar al ascensor, planta -1 y allí os encontráis con una piscina interior climatizada y con chorros jacuzzi que puedes encender o apagar según el gusto...¿Qué diríais?
Pues esa es la experiencia que propone La Lanterne. Además de la piscina la zona spa cuenta con un Hamman con el que podéis complementar vuestro momento de descanso
Así que es estáis indecisos y no sabéis dónde dormir en Paris, Hotel La Lanterne es una opción de acierto seguro. Os dejo alguna foto más de las que hice para que tengáis una mejor perspectiva.
Muchas gracias al Hotel La Lanterne por alojarme en su magnífico rincón de París. Por supuesto, y como siempre, todas las opiniones son mías.